Relato participante en el concurso Rosas per Sant Jordi organizado por rosessantjordi.com y en la que participamos. Al final del relato encontrarás un botón para votarnos.
Sant Jordi, el patrón de los enamorados. Cabalgaba en su caballo blanco hacia el castillo de su amada princesa. Subió a su habitación y encontró a la princesa inconsciente y tendida en el borde de su tálamo. Se acercó a ella y se percató de que había perdido la vida. El caballero sabía que solo había una forma de salvarla y no contaba con mucho tiempo. Salió con rapidez y prontitud, dirigiéndose hacia el túmulo de la bestia a la que una vez atravesó con la cruz de cuatro brazos. Tal como arribó, clavó su espada en el centro del sepulcro del dragón. De la tierra brotó una rosa con un rojo vivo y fluorescente. Cogió la rosa con delicadeza y cabalgó de vuelta al castillo. Subió por su amada y colocó primorosamente la rosa en el corazón de la princesa. El color de la rosa se desvaneció lentamente, y su amada se reincorporó pausadamente. El patrón de los enamorados salvó una vez más al amor de su vida y le juró protegerla hasta el fin de los tiempos.
Crea la teva Rosa Virtual i l'enviarem el 23 d'abril